jueves, 29 de noviembre de 2018

Cuidado con el mono

Germán Burgos
Los entrenadores del fútbol actual (hablamos de las ligas grandes, por decirlo de alguna manera) son casi tan importantes que los propios futbolistas. Prueba de ellos es que cada vez más parecen modelos en la banda, dando órdenes y gesticulando con trajes entallados y peinados a la última. Saben que las cámaras se ocupan de ellos tanto como sus pupilos y no quieren pasar por alto su momento de fama televisivo. Pero no nos olvidemos que en el banquillo no solo está el entrenador y los suplentes, sino parte del cuerpo técnico, incluido el segundo entrenador. Esa figura que ha ido cobrando cada vez más importancia. Son la mano derecha del míster y los que en ocasiones se parten la cara por él. Un ejemplo es el "Mono" Burgos en el Atlético de Madrid. Es el guardaespaldas de Simeone y el que ladra al que se le ponga por delante. Sus pintas se alejan del glamour y los flashes, siempre va en chandal y con cara de recién levantado de la siesta. Nadie puede con él, a veces ni el propio "Cholo". 
Si hay un personaje del fútbol actual al que puedes ilustrar cabreado (o al menos con ese gesto) es al "Mono" Burgos. Era mi intención sacarlo con estilo cómic y gesticulando a su estilo. Hice el trabajo a lápiz y tinta y lo coloreé en Adobe Illustrator. Quizás un fondo le habría venido bien a la composición.

jueves, 22 de noviembre de 2018

Sin estrella

Abelardo Fernandez
El mundo y el ambiente del fútbol es a veces extraño y retorcido. No se ustedes, pero tengo la percepción de que desde hace unos años (no sabría decir a partir de cuando) se ha implantado una especie de zona alta y zona baja en lo que al mercado de jugadores y entrenadores se refiere. Me explico: hay futbolistas y entrenadores que hagan lo que hagan o incluso lo hagan rematadamente mal, siguen teniendo un cartel y un caché de la hostia. Se cotizan al alza y mueven unas cifras económicas acojonantes. No se si tirarme a la piscina y dar nombres, pero si que me la juego por el bando perdedor. Entrenadores como Abelardo, que con cuatro perros y dos duros te monta un equipazo y nadie dice nada. Me parece que la vara de medir en la prensa deportiva es diferente según a quien se mira. Ya vale de gente que vive de glorias pasadas y rentas, apostemos por currantes de verdad, por auténticos profesionales. 
Esta ilustración la hice hace mucho tiempo y quería rescatarla. Está hecha con lápiz, tinta y acuarelas. La cara de Abelardo es bastante peculiar y quería resaltar su “fealdad “, que hasta en eso me parece un tipo original y diferente. No tiene muchos detalles ni está adornada, es simple. Disfrutemos del fútbol.

jueves, 15 de noviembre de 2018

Señor Presidente

Louis Nicollin
Es un hecho: la sociedad en la que vivimos es cada vez más y más descafeinada. Todos queremos agradar y caer bien, y para ello no tenemos que ofender a nada ni a nadie. Y claro, resulta que como consecuencia de esto nos ofendemos por todo, la piel se nos ha hecho muy fina. Cualquier cosa que hagamos o digamos es susceptible de molestar a alguien, por muy insignificante que nos parezca. Y el fútbol es parte de esto. Ningún engranaje del mundo del fútbol se moja ni quiere romper moldes. Atrás han quedado tipos como Jesús Gil, Maradona, Cantona o Louis Nicollin. Este último fue presidente del Montpellier francés. Tampoco hizo nada del otro mundo, se tintó el pelo cuando su equipo ganó la liga. Otro como Gaspart se bañó en una fuente pública y alguna otra locura habrá hecho algún mandatario allá por los 80, 90 o comienzos del siglo XXI. Hoy eso ya no pasa. Somos unos flojos. ¡Viva la incorrección!
Me inspiré en una fotografía del personaje sacada de un anuario de France Football. Hice la ilustración con portaminas y tinta. Me centré en la cabeza y trabajé toda la ilustración con Adobe Illustrator.

jueves, 8 de noviembre de 2018

El tercer tiempo

Ma'a Nonu
Hay un dicho en las islas británicas que reza lo siguiente: "el fútbol es un juego de caballeros jugado por bestias y el rugby es un juego de bestias jugado por caballeros". Quienes tenemos una mínima noción del rugby (si estás leyendo esto doy por hecho que amas el fútbol) sabemos que es totalmente cierto. Existen comportamientos en cualquier partido de fútbol, desde las pachangas a las finales de cualquier Mundial, que serían totalmente inadmisibles en un partido de rugby. Creo que es casi imposible ver a todo un equipo de rugby encarando a un árbitro, o simulando una falta como si fuese cuestión de vida o muerte. Es más, existe el famoso tercer tiempo, que es una tradición nacida desde el comienzo de este deporte y que consiste en un encuentro de camaradería entre ambos equipos. "Con ello se busca que en el rugby el fin no sea la victoria, sino la camaradería y la amistad", según reza la Wikipedia.
Y para ello, ilustro al neozelandés Ma'a Nonu. La mole mide metro ochenta y dos y pesa ciento seis kilos. Y pese a todo sabe que el rugby es solo un juego. Ya me gustaría irme de tercer tiempo con este tipo. La ilustración quería transmitir la seriedad y a la vez la dureza de este deporte. La hice hace bastante tiempo pero la quise rescatar para la ocasión. Está hecha a lápiz y tinta y terminada en Adobe Illustrator. El fondo con trazos de acuarelas es digital y está hecho con Adobe Photoshop, quería darle un aire tribal a la composición.

jueves, 1 de noviembre de 2018

Sin hacer ruido

Sergio Busquets

En el fútbol actual (y en la sociedad en general) la imagen lo es casi todo. Los personajes que componen el mundo del fútbol profesional están más pendientes de la imagen que de otras cosas. Sabiendo que cientos de cámaras les apuntan a cada momento, buscan hacer guiños a sus fans a cada rato: tatuajes, peinados, celebraciones están entre sus repertorios. Pero hay tipos como Sergio Busquets que juegan al fútbol, que pueden caer mejor o peor, que utilizan sus artimañas, pero que se centran en jugar bien. El resto no les importa. Y así sin hacer ruido un tipo como Busquets se convierte en líder de un gran equipo como el Barcelona.
Esta ilustración la hice hace bastante tiempo pero quise rescatarla para el blog. La hice con lápiz y tinta y la acabé con Adobe Illustrator. Le di el toque de luz en el dedo porque me hizo gracia el gesto. En su momento la ilustración se quedo incompleta hasta que hace poco decidí rematarla con el fondo para cerrar la composición y no dejarla tan suelta.